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La rapidez con la que las empresas tuvieron que reaccionar para hacer frente a los cierres precipitados debido al COVID-19 obligó a muchas de ellas a tener a parte de sus empleados, equipos o departamentos trabajando remotamente, lo que revelo las capacidades de comunicación insuficientes de muchas de ellas. Concretamente son tres los problemas que surgieron:

–Conectividad inconsistente. Sin acceso a las capacidades de comunicación a nivel empresarial de sus ofocinas, la mayoría de los trabajadores domésticos tenían que apoyarse en las redes móviles desde sus dispositivos móviles personales.

–Cortes de red. Las comunicaciones fiables y seguras son clave para mantener a los equipos distribuidos geográficamente funcionando en su mejor momento. Pero las interrupciones de la red son más comunes de lo que a la mayoría de las empresas les importaría admitir.

–Contacto fragmentado. Las empresas con sistemas de comunicaciones deficientes presionan a sus trabajadores remotos para que utilicen dispositivos móviles. Reemplazar el sistema tradicional de un número de empresa por una red dispar de números de teléfono móvil puede dificultar el contacto tanto interna como externamente.

Disponer de una fuerte infraestructura de comunicaciones es vital para garantizar que los equipos híbridos tengan acceso al mismo nivel de recursos, ya sea dentro o fuera de la oficina. En este caso, la telefonía alojada en la nube beneficia a los equipos híbridos de varias maneras en las que los sistemas telefónicos tradicionales se quedan cortos.

Un sistema de telefonía en la nube, permite mantener a todos y cada uno de los equipos, tanto en la oficina como fuera, conectados y contactables. El protocolo de voz a través de Internet (VoIP), que es lo que sustenta los sistemas de telefonía basados en la nube, empodera a todos con la misma calidad de voz nítida y clara, independientemente de la ubicación, la zona horaria o la elección del dispositivo.

Los mejores servicios de telefonía en la nube se ejecutan en arquitectura con redundancia geográfica, lo que significa que el servicio es soportado desde varios centros de datos en diferentes ubicaciones, lo que ofrece a los usuarios una conexión resistente y “siempre disponible”. La telefonía en la nube también permite que todos los empleados, en cualquier dispositivo y en cualquier ubicación, estén conectados a través de un solo número de negocio. Los mejores proveedores de telefonía en la nube también concederán a los usuarios un identificador de llamadas sofisticado, por lo que cuando realice una llamada saliente, el destinatario sabe que su empresa está en la otra línea.

Ventajas de la telefonía en la nube

El mercado de sistemas de telefonía en la nube está creciendo constantemente. De 2017 a 2022, las extensiones en la nube aumentarán de 13 millones a 26 millones en Europa. Facilidad de uso, independencia total y fiabilidad son las credenciales de los sistemas de telefonía en la nube.