Se ha presentado el Informe sobre Amenazas Ransomware 2021 por parte de la unidad de inteligencia y amenazas y de respuesta a incidentes de Palo Alto Networks. Una de las conclusiones fundamentales en cuanto al análisis de amenazas ha sido el importante incremento en las cantidades exigidas como rescate a las víctimas del ransomware, ataques en los que se toma posesión del equipo informático, bloqueando su acceso y dejándolo inutilizado mientras no se abone el rescate.
El informe, difundido por CanelaPR, detalla que la cantidad del rescate medio pagado a los ciberdelincuentes aumentó un 171 % durante 2020. Además el importe del rescate más alto pagado creció un 50%. Los principales objetivos de este tipo de ataques son las organizaciones sanitarias dado que debido a la pandemia el sector de la salud se ha convertido en el más vulnerable. Dado que las instituciones sanitarias tenían que seguir operando para tratar a los pacientes con COVID-19 y no podían mantener bloqueados sus sistemas informáticos, los ciberdelincuentes han dirigido mayoritariamente sus ataques a estos centros.
Así es un ataque ransomware
Un ataque de ransomware se inicia con una intromisión en los servidores de la víctima, procediendo el atacante a cifrar los datos almacenados, obligando a la víctima a pagar un rescate para desbloquearlos. Puede darse además una doble extorsión, en la que se cifran y roban datos para obligar aún más a la víctima a pagar un rescate. Si no se paga el rescate, los ciberdelincuentes filtran los datos en Internet, con el consiguiente perjuicio para la empresa o el profesional que ha sufrido el ataque.
Palo Alto Networks ha evaluado amenazas y ataques correspondientes a Estados Unidos, Canadá y Europa detallando las principales variantes de ransomware (con enlaces a evaluaciones de amenazas para cada variante), los pagos promedio, predicciones de ransomware y expone los próximos pasos para reducir al máximo posible el riesgo de este tipo de ataques.
Rescates cuantiosos
El rescate medio pagado tras un ataque de tipo ransomware era de $115.123 en 2019, pasando durante 2020 a $312.493, con un crecimiento del 171%. En cuanto al rescate más alto pagado pasó de 5 a 10 millones de dólares en el mismo periodo.